18 de marzo del 2.012. UN DIA PARA NO OLVIDAR

Ayer nuestra comunidad vivió momentos muy bonitos, ayer recordábamos como un 18 de marzo hace 800 años Clara de Asís abandona su casa para seguir a Cristo y así comenzó nuestra forma de vida, una vida de fraternidad y pobreza, de oración, de trabajo, una vida de entrega a aquel que nos ha amado sin medida.

En la eucaristía en la monición de entrada hicimos memoria de este acontecimiento y también en las preces.

También celebrábamos ayer los 101 años de nuestra hermana Pilar, aunque lleva unos días malilla, ayer cuando le cantamos el cumpleaños feliz nos miraba complaciente con esos ojillos azules, aunque no nos pueda decir nada con su voz, nos lo dice todo con su mirada, para esta comunidad es un regalo, quizás no se entienda porque hoy se mira la eficacia y mucha gente dice ¿Por qué Dios tiene a esa persona ahí sufriendo? Os puedo decir que su cara no es de sufrimiento. Y que a nosotros no nos cuesta nada cuidarla porque vuelvo a repetir que para nosotras es un regalo y la queremos mucho.

Al caer la tarde después de la oración de vísperas, hicimos una oración con Santa Clara leímos el relato de la leyenda del Domingo de Ramos en el cual se nos explicaba que ocurrió ese día y que hizo Clara. Después dos hermanas danzaron con música llevando unos signos, después se nos leía textos de Santa Clara y San Francisco, después leímos un salmo, el salmo 138 “ Te doy gracias, Señor, de todo corazón” después compartimos nuestras experiencias y cada hermana daba gracia por el don de la vocación, al finalizar renovamos nuestros votos.

Un día inolvidable, sencillo, pero es que nosotras disfrutamos con las cosas sencillas.